Japón es un país muy peculiar, es el anhelo de bastantes que queremos visitarlo ya sea por su cultura, los edificios, la comida, el anime, etc. Y es también un país que despierta curiosidad entre los habitantes de otras naciones, al tener ciertas modas o particulares maneras de vivir. Entre la infinidad de rasgos que caracterizan a la sociedad japonesa, fue de mi atención algo que noté primeramente en series de anime y después en videos tomados a sus ciudadanos, anuncios comerciales, etc.

Observé algo a lo que quizá no le había puesto atención anteriormente: los celulares más populares en Japón siguen siendo los llamados teléfonos “sapitos” o celulares “Galápagos”, este término acuñado por haber evolucionado únicamente para satisfacer las necesidades de los japoneses. 

Si ustedes tampoco se han dado cuenta, quizá puedan echarle un ojo a múltiples series de anime y fijarse en los móviles que usan los personajes. Sinceramente es algo que a mí me llamó mucho la atención, porque al ser Japón un país súper desarrollado tecnológicamente hablando, la nación donde ya se están implementando robots como cajeros o recepcionistas en hoteles, sus habitantes prefieren los celulares con tapa antes que los modernos smartphones.

Entonces ¿Por qué los japoneses prefieren los “sapitos” y no a los celulares inteligentes? Según el Ministerio de Telecomunicaciones, los usuarios en Japón están entre los que más pagan por planes de telefonía móvil entre las naciones con alto nivel de desarrollo. 

Las tarifas de los celulares plegables suelen ser más económicas que las de un teléfono inteligente y a pesar de que estos tienen “touchscreen”, poseen una pantalla un poco más amplia y múltiples funciones más, los japoneses prefieren el de tapa, utilizando botones, con una pantalla más pequeña, pero gozando de más batería en su móvil, tomando en cuenta que el japonés usa su celular para ver televisión, jugar videojuegos, navegar en internet, conferencias de video y en ocasiones para llamadas, por lo cual es vital la batería, donde los móviles de tapa salen ganando.

Las islas Galápagos, son el hogar de especies únicas y especiales de plantas y animales, que no se encuentran en otros sitios del planeta. La sociedad nipona ha sido llamada de esta forma, al mantener un estilo de vida que los aparta de cierta manera del resto del mundo, ya que ellos también lo prefieren así. Es por ello que entre las teorías que tratan de explicar su preferencia por teléfonos plegables, una es que al ser Japón un país donde todo les gusta adaptado a su manera y sólo para ellos, es natural que también prefieran celulares únicos y con especificaciones que se acomoden a su ritmo de vida.

Claro que hay gran cantidad de japoneses que utilizan “smartphones” sin embargo, según algunas investigaciones, datos arrojan que por primera vez en 7 años, los envíos de los celulares “sapito” crecieron en 5.7% (10.5 millones de unidades) mientras que los móviles inteligentes, mostraron una caída de 5.3% (27.7 millones de unidades) de acuerdo al MM Research Institute.

Los animadores logran reflejar la preferencia de la sociedad japonesa por estos teléfonos en algunas series de anime como “Mirai Nikki”, “Death Note”, entre muchas otras series más. Hideaki Yokota, representante de MM, declaró a inicios de este año, que los japoneses podrían estar regresando a los móviles plegables, gracias a que estos suelen ser también más económicos que los de nueva generación, aunque estos estén atiborrados de numerosas funciones y aplicaciones atractivas, luego de una década de haber debutado, los celulares de tapa son todavía los más populares.

Existen un montón de situaciones que vemos en la sociedad en general que no comprendemos, pero en este caso hablando de Japón, existen infinidad de aspectos que despiertan interés y curiosidad en la mayoría de nosotros, al ser lo suficientemente extremos, excéntricos o “extraños” para quienes no estamos acostumbrados a ciertas conductas, tradiciones o simplemente, modas.

“La actividad más importante que un ser humano puede lograr es aprender para entender, porque entender es ser libre”. Baruch Spinoza.